En ocasiones, las personas verdaderamente amantes del deporte desafían todo tipo de reglas escritas y son protagonistas de vivencias realmente increíbles, de esas que te dejan con la boca abierta.
Así que hoy, va por todas aquellas que han conseguido con el deporte, superar la carrera más importante de su vida: el cáncer.
Todo un ejemplo de superación y una clara demostración de que, con ganas de vivir, todo es posible.
Aquí van algunas de estas historias, llenas de sentimientos y superación personal:
Sindy Hooper, una atleta de 50 años con cáncer de páncreas que, en pleno tratamiento de quimioterapia tras una dura operación quirúrgica, consiguió terminar con éxito un Ironman.
Novlene Williams Mills La velocista jamaiquina celebró en una medalla de bronce en los juegos de Jamaica. Tres días después fue operada a causa de un tumor cancerígeno en el pecho que le fue diagnosticado un mes antes de las competencias olímpicas y que mantuvo en secreto para no afectar a sus compañeros de equipo.
Joan Clofent: Con 61 años y vida de deportista saludable, le sorprendió un cáncer de muy mal pronóstico. Una vez operado, supera la enfermedad escalando las 7 grandes cimas del mundo.
David Cañada el ciclista español dejó la actividad deportiva al padecer un cáncer de piel. Estuvo retirado durante una temporada y logró recuperarse y regresar a la competición.
Janner: con 64 años supera un cáncer y corre 365 maratones en un año.
De todos ELLOS podemos aprender algo. Auténticos #NeverStop, sin límites, sin temores, con ganas de vivir.
Y tú, ¿tienes alguna historia #NeverStop? Cuéntanosla aquí abajo, en Facebook o Twitter.
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